DE PASEO POR IRLANDA (14/03/2023-19/03/2023)
Por Mariló y José
Como ya nos ha ocurrido en algunas ocasiones y, a riesgo de repetirme con este comienzo: “No fue este un viaje de pajareo propiamente dicho”.
La idea era relajarse, desconectar y exprimir al máximo el poco tiempo del que disponíamos para conocer todo lo que nos diese lugar de Dublín y de Galway. Para colmo, nuestra corta estancia allí coincidió, nada más y nada menos, con ¡el Día de San Patricio! Sin pensarlo un segundo nos ataviamos de verde (sombreros, pajaritas, silbatos, pinturas, etc.) y nos fuimos a celebrar el Día Grande de Irlanda como unos irlandeses más, algo más morenitos y frioleros que ellos, eso sí, je, je.
Antes de salir a la calle, nuestra casera Clarisse nos regaló un manojito del tradicional Shamrock [el aleluya (Oxalis acetosella), en este caso] para que pudiésemos lucirlo prendido de nuestras ropas. Se nos encogió el corazón cuando le preguntamos acerca de la imagen de un petirrojo que apoyaba junto a la fotografía de su recientemente desaparecido marido:
- “Robins appear when loved ones are near”, […] nos aclaró.
Entre todos esos ejemplos de “todo al revés” que los irlandeses comparten con los británicos como, por ejemplo, la conducción por el lado izquierdo de la carretera, las salchichas con alubias cocinadas para el desayuno y demás particularidades de la isla, todos los lugareños de por allí felicitaban a sus madres el 19 de marzo mientras que nosotros, “los guiris”, llamábamos por teléfono a nuestros padres por el Día del Padre.
En fin, un verdadero “caos entrañable” que nos enamoró y arrancó la promesa de regresar en el futuro.
¿Homesick? Sí, por supuesto, genuino, sincero e intenso homesick.
Compartimos aquí algunas fotos, la mayoría de ellas testimoniales, ya que, a las limitaciones técnicas de nuestro equipo, al poco lapso de tiempo del que dispusimos y a la gran distancia que nos separaba de los ejemplares se le sumaba el hecho de que muchos de los días estaba lloviendo o estaba a punto de hacerlo.
Fotografías: Mariló y Juanjo.
Por último, quisiéramos agradecer a Luna y a Juanjo su infinita paciencia cada vez que nos parábamos a contemplar cualquier ave que se nos ponía por delante.
VIAJE A LA LAPONIA FINLANDESA Y PENÍNSULA DE VARANGER 2022
Por Alfonso Barragán
Nuevo viaje pajarero a la Laponia Finlandesa y a la península de Varanger en Noruega. Vuelos desde Málaga a Helsinki y desde allí a Oulu.
Esta vez, fuimos cuatro componentes del GOSUR: Jesús Fernández, Alberto Plata, Oscar Rodríguez y Alfonso Barragán.
La intención era observar algunas de las especies de aves representativas del la Taiga y de la Tundra y ver algunos animalitos con pelos. El viaje fue satisfactorio, aunque algunas especies se quedaron en el tintero.
Teníamos 24 horas de sol. La actividad de las aves era a partir de las 2 de la madrugada, así que había que dormir por la tarde.
Vimos casi todo lo que se podía ver en estas fechas tanto en Finlandia como en la península de Varanger. Ver lista.
EL DISTRITO DE LOS LAGOS
Por: Mariló y Jose.
A principios de este mes de octubre dejamos aparcadas nuestras vidas aquí en la península y partimos rumbo a Inglaterra, a pasar unos días de desconexión en el Distrito de los Lagos, a dos horas de tren hacia el noroeste de Mánchester.
Ha sido nuestra primera visita a Reino Unido así que, aunque no nos pillara desprevenidos, todo nos resultó nuevo y excitante: sus típicos Full English breakfasts, sus Pounds & pence, sus Pints & pies, etc. ¡hasta nos atrevimos a alquilar un coche, de esos de “todo al revés”!
PAJAREANDO POR SENEGAL
Por: Alfonso Barragán
Del 27 de enero al 2 de febrero de 2020.
Participantes: Paco Cabrera, Paco Chiclana, Fernando del Valle, José Lama y Alfonso Barragán
Guía utilizada “ Birds of Senegal and The Gambia.” de Nik Borrow y Ron Demey.
Aunque han sido pocos días, Senegal es un país increíble para ver aves. El resultado ha sido magnífico, con 225 especies de aves observadas, amén de reptiles y mamíferos.
TULAYTULAH
Por: Mariló y Jose.
A principios de mes, decidimos “quitarnos la espinita” y realizar la visita obligada a la Ciudad Imperial, que habíamos ya pospuesto en demasiadas ocasiones.
La otrora verdadera “Nueva York” de su época, la Ciudad de las Tres Culturas, cosmopolita, epicentro del arte y la cultura, antes del declive que produjo la decisión del Rey Felipe II, de trasladar la corte desde Toledo a Madrid, para convertir a ésta última, en la capital de su Reino (en 1561), se elevaba allí, sobre el internacional Tajo, espléndida y señorial, como siempre.